«Cuando empezamos a organizar todo en agosto de 2019, nunca nos imaginamos que en 2020 ocurriría algo semejante al COVID, pero desde que toda esta situación empezó tuvimos muy claro que queríamos casarnos el 12 de septiembre en las circunstancias que fueran. Fueron unos meses de mucha incertidumbre, pero finalmente mereció la pena aguantar porque pudimos disfrutar de un día inolvidable«. Así empezaba a contar Belén su gran día. Ella y Borja decidieron seguir adelante y dar el «Sí quiero» en esta nueva normalidad, que cambia cada día…
Como siempre digo, cada uno de los proveedores está trabajando para poder adaptarse y para garantizar a las parejas la seguridad y el cumplimiento de las medidas; «contamos con la gran ayuda de nuestros proveedores, entre ellos, el Gran Hotel de la Toja que nos ayudó muchísimo en todo e hizo posible que pudiéramos disfrutar mucho de ese día y al mismo tiempo, garantizar la seguridad de todos».
El vestido de Belén, creación de Lorenzo Caprile me enamoró. «Yo nunca tuve claro cómo quería que fuera mi vestido, pero el día que fui a hacerme la prueba a su taller, me encantó la idea que me propuso, sin apenas decirle nada. Es un genio».
Completó su look con unos zapatos de Flor de Asoka, un anillo regalo de los padres de Borja y una tiara y unos pendientes de su abuela. Además, Melanie Fernández Castro se encargó de su maquillaje; «que me encantó por lo natural que maquilla y además es encantadora», y Rebeca Senra de su espectacular ramo.
Por su parte, Borja llevó un chaqué de Toque de Sastre y un chaleco de Anglomanía. Ambos se cambiaron en el Hotel de la Toja, y desde allí
fuimos andando a la Capilla. «Nuestros pajes iban delante de mí todo el camino, vestidos de Chami, fue muy gracioso verles avanzando y mirando para atrás por todo el camino, incluso al más pequeño que empezó a andar un mes antes».
«Elegimos casarnos en La Toja porque es un sitio muy especial para nosotros, al que vamos en verano, mis abuelas eran gallegas, y donde Borja me pidió casarme con él. Nos gustaba mucho la idea de que fuera todo cerca y fácil para los invitados». Belén y Borja se casaron en la Capilla de la Virgen del Carmen; «conocida porque por fuera está cubierta entera de conchas».
«Como la Capilla es pequeña pusimos unas carpas fuera con pantallas para que todos los invitados pudieran seguir la misa, garantizando su seguridad. La misa fue muy emotiva y especial, celebrada por un sacerdote muy amigo de la familia de Borja. Nunca la olvidaremos».
Tras la ceremonia, se trasladaron al embarcadero del hotel, donde tuvo lugar el cóctel y posteriormente a uno de los salones, decorado por Rebeca Senra, que también se encargó de decorar la Capilla. «Me encantaba la idea de que hubiera flores silvestres y hortensias, para que se notara que estábamos en Galicia. Me encantan las flores y por eso también quería que nuestras invitaciones de la boda fueran especiales, y finalmente nos decantamos por unas que tenían en el sobre el mismo estilo de
flores. Se encargó de prepararlas 255 Paper and Design«.
«De la música en todo momento se encargó R Música Djs e hicieron que todos disfrutáramos muchísimo. Además, se notaba las ganas que tenía todo el mundo de celebrar y vivir algo alegre por fin, después de tantos meses, pero por supuesto con mucha responsabilidad». Con Emoción Wedding & Events prepararon el candy bar y organizaron juegos para los pajes, «que se lo pasaron en grande». «Nos hizo un día increíble, ¡creo que pudo ser el más caluroso del verano!»
Y si hoy podemos ver los mejores momentos de este gran día, es gracias a las maravillosas foto de Ocho Veinticuatro, que nunca faltan en nuestro perfil. «¡No podemos estar más contentos con su trabajo!». Belén mil gracias por compartirlo conmigo. ¡Os deseo lo mejor!
Fotos: @ochoveinticuatro