¡Qué ganas tenía de publicar esta boda en el blog! Y es que el testimonio de Sandra me conmovió tanto que quería compartirlo con vosotros para animaros a decir Sí al amor independientemente de las circunstancias. Su boda fue maravillosa, como también lo son estas imágenes de Click Fotografía.
«Tenemos que reconocer que pasamos por momentos complicados y difíciles, donde perdimos en muchas ocasiones la ilusión, nos preguntábamos si realmente era una locura seguir adelante con nuestra idea de decirnos Sí quiero en mitad de una pandemia porque solo recibíamos preguntas como: ¿Qué vais a hacer?, ¿Vais a seguir adelante?, ¿No posponéis?, ¿Entonces hay boda? Pero a pesar de todo, nos podían las ganas de casarnos, porque solo éramos necesarios Joan y yo a pesar de que siempre queremos estar acompañados de nuestros seres queridos. Pero es que la vida no se para, el tiempo pasa y no podemos seguir posponiendo nuestras vidas porque no sabemos qué pasará mañana. Hay que vivir el momento tal y como nos toca vivirlo». Así es, un testimonio tan duro como auténtico, con el que muchas novias se sentirán identificadas.
Sandra y Joan se conocieron de Erasmus en Salerno, Italia. En 2015, ambos decidieron emprender esta aventura por separado y el destino quiso que la terminaran juntos. «Vivimos el mejor final de Erasmus que podíamos imaginar recorriendo cada día juntos la costa amalfitana y viviendo un montón de momentos únicos e inolvidables». Cuando la experiencia llegó a su fin, lo que parecía una despedida acabó convirtiéndose en el principio del viaje más especial de sus vidas. Y así fue como empezó su bonita historia de amor.
Se comprometieron en 2019 en la playa de Trabucador del Delta de Ebro. «Un lugar sumamente mágico para nosotros ya que fue el primer sitio donde estuvimos cuando volvimos de nuestra vida en Italia y siempre que vamos a su tierra nos reservamos nuestro momento allí para ver los atardeceres».
«Cuando empezamos a organizar nuestra boda, por un momento se nos pasó por la cabeza que tenía que ser donde todo empezó, en Italia, en nuestra costa amalfitana, pero sabíamos que mucha gente importante para nosotros, como son los abuelos, no podrían estar a nuestro lado. Entonces decidimos que haríamos nuestra boda donde los dos decidimos empezar una vida juntos, en Madrid». Si algo nos ha regalado esta pandemia es aprender a valorar el tiempo con los nuestros.
La iglesia que eligieron para el Sí quiero fue Los Jerónimos, en Madrid. «Aquella iglesia ha sido testigo de nuestros paseos con nuestra perrita Lola. Siempre que estábamos allí la mirábamos y decíamos: “Algún día será aquí”. Para nosotros fue todo un sueño tener disponible la fecha que queríamos allí». Y así fue, el 19 de junio se casaron contra todo pronóstico. «Fue nuestra primera y única fecha porque por suerte no hemos tenido que posponer nuestra boda. Teníamos claro que pasara lo que pasara queríamos casarnos, con pandemia o sin pandemia, con mascarilla o sin mascarilla, con toque de queda o sin toque de queda, o con cualquier medida que nos impusieran en ese momento. Para nosotros lo importante era casarnos, decirnos sí a estar toda una vida juntos, sí al amor y sí a una vida juntos, daba igual cómo, lo importante era hacerlo». Me quedo con estas palabras que resumen a la perfección el verdadero significado del matrimonio.
Debido a que la mayor parte de los invitados era de fuera de Madrid, dicidieron hacer una recepción preboda la noche anterior en la azotea del Hotel Vincci 66, en Gran Vía. Para esa ocasión, Sandra lució un vestido diseñado por ella misma. ¡Estaba radiante! «La preboda fue uno de los momentos que con más cariño recuerdo. Fue tan mágico reencontrarse con tanta gente a la que queremos después de tanto tiempo sin vernos, y más después de los confinamientos y restricciones de movilidad». Qué dura se hace la espera pero qué bonitos son los reencuentros.
Al día siguiente, Sandra se preparó en su apartamento junto a su familia, sus amigas y su perrita, la cual cumplió un papel muy importante en su día acompañándola durante los preparativos. Para este momento, eligió una bata a medida diseñada por Esmarfiles, regalo de sus padres. «Guadalupe supo ver mis gustos e hizo una bata preciosa combinada con seda y encajes».
Los preparativos son momentos muy emocionantes en los que los sentimientos están a flor de piel. Sus amigas hicieron que estos instantes fueran todavía más especiales dedicándole unas palabras. También, le regalaron una cadena de oro con un diamante y dos cuadros personalizados con la ciudad de Salerno y la frase «Todas las coordenadas me llevan a ti», con las coordenadas de la ciudad donde el destino quiso unir a la pareja. Un momento para recordar siempre, y es que… ¡qué haríamos sin nuestras amigas!
Durante los instantes previos al Sí quiero, Sandra también tuvo una sorpresa muy especial. Joan le envió un ramo de flores junto a una nota que ponía: «Que estas flores te hagan estar todavía más radiante. Te veo luego. Te quiero. PD: Puntualidad”. Estos detalles son los que hacen ese día inolvidable y a mí, personalmente, me encantan.
Por otro lado, Sandra también quiso sorprender a Joan, y le entregó, por medio de sus padres, una carta escrita de su puño y letra junto a un pañuelo bordado con la frase “No nos quedemos con lo vivido, si no con lo que nos queda por vivir. Ti ama tu mujer.”
El traje de Joan, fue diseñado y confeccionado a medida por Bere Casillas con tela importada de Inglaterra. Fue un diseño lleno de detalles, tal y como él quería. El color azul marino fue el protagonista y un dibujo de cuadro muy sutil rompía con la sencillez, dándole un toque diferenciador y original. Para el forro de la chaqueta, los tirantes y el pañuelo, arriesgó con un forro marrón con lunares blancos y flamencos, para hacer un guiño a su tierra y al lugar donde le pidió matrimonio a Sandra. Los gemelos eran vespas, por todas aquellas veces que alquilaban una de ellas para recorres la costa amalfitana, los puños de la camisa iban bordados con sus iniciales y el chaleco de color blanco roto con un estampado que no dejaba indiferente a nadie. El look lo completaban unos Oxford de Lottusse. ¡A la vista está lo elegante que iba!
El equipo de Oui Novias fue el encargado de maquillar y peinar tanto a Sandra como a su madre. Eligió un maquillaje muy sencillo y natural con sombras suaves que resaltaban su mirada. En cuanto al peinado, se decantó por algo más serio, formal y clásico con una tiara personalizada de María Mayz para la ceremonia, y algo más desenfadado para el banquete y la barra libre. Así que, la mejor opción fue un recogido desmontable que le permitió cambiar de look con un semirecogido.
Del ramo se encargó Flores Búcaro. «El ramo quería que fuera algo fresco y nada formal con los colores de la boda». Y así fue. Sandra añadió, por su parte, una medalla de la virgen del Carmen, en homenaje a su abuela Carmen que ya no está con ella, y una cinta beige con las iniciales de la pareja y una frase muy especial para ellos. Sin duda, un ramo de novia con un gran valor sentimental.
Sandra lució un precioso diseño de Valenzuela. «Tenía claro que lo que quería de mi vestido es que me representara. Soy una persona muy sencilla, pero a la vez me gusta la moda, pero ante todo la elegancia. Para mí la frase “menos es más” me define a la perfección y es lo que iba buscando. Cristina supo entenderme perfectamente. Solamente al ponerme telas por encima, pude imaginarme el vestido que estábamos diseñando y que tenía en mi mente y no pude evitar llorar. En ese momento supe que después ver 12 atelieres, ese sería mi vestido y no podía ser otra diseñadora que ella la que lo hiciera realidad, que crease el vestido de mis sueños, y la verdad que fue mejor de lo soñado e imaginado». Y es que Cristina y sus diseños tienen algo muy especial que conquistan a todas las novias.
Para la ceremonia y el banquete, Sandra eligió un vestido de crepé sobrio, clásico y con una cola de brocado forrado con organza de 3,5 metros. Un diseño recto con una apertura trasera en la falda y un escote en la espalda de escándalo. Las mangas eran sutilmente abullonadas forradas de organza también para que se mostraran con volumen. Para completar el look, apostó por un velo liso de tull en beige bordado con la frase «Sì all’amore» con las iniciales de ambos, igual que en la cinta del ramo. Las novias veladas son mis favoritas y Sandra fue un flechazo total.
Los zapatos que eligió eran de rafia, de Figara. «Era justo lo que buscaba, ya que quería que tuviera un punto de color y eran perfectos para los tonos de la corona».
En cuanto a las joyas, Sandra apostó por «menos es más», y lució únicamente el anillo de pedida y unos pendientes en forma de estrella con diamantes a juego con la corona. «No encontraba los pendientes que tenía en mi cabeza en ninguna joyería de Madrid y te contacté preguntándote por joyeros que pudieran hacer un diseño concreto y me recomendaste a Álvaro Montejo. Una de las mejores recomendaciones que me han hecho porque supo captar mi idea, darle forma y hacer mis pendientes realidad. Hicimos unos pendientes en forma de erizo, estrella o de puntas con varias orlas de diamantes y un diamante central. Hicimos dos unidos por un diamantito. El de arriba más pequeño que el de abajo y desmontable la parte de debajo de la de arriba para poder usar los pendientes desmontables en mi vida cotidiana. Los pendientes fueron un regalo de mis padres». Feliz de haberte podido ayudar a encontrar los pendientes perfectos para tu look. Álvaro comprende a la perfección lo que buscas y sabe materializar tu idea para hacerlo realidad, sin duda lo recomiendo a todas las novias que quieran unos pendientes únicos y diferentes.
Después, fue hasta la iglesia acompañada por su padre y su perrita en un coche antiguo de Chic Car, y a las 12 de la mañana dio comienzo la ceremonia, oficiada por un sacerdote amigo de la pareja.
Al llegar al altar, ambos vivieron un momento muy especial de máxima complicidad. «Cuando llegamos a la iglesia y nos encontramos en el altar, me dijo: “Mira” y se abrió la americana enseñándome el bordado, entonces yo le dije: “Mira al final del velo” donde estaba también el bordado de la frase en italiano. Ninguno de los dos sabíamos nada y fue una sorpresa que nos quisimos hacer y al final los dos pensamos lo mismo».
«Cuando salimos de la iglesia, nuestra perrita Lola estuvo con nosotros. Quería que, aunque no pudiera entrar, estuviera también allí con nosotros como tantas tardes habíamos estado los tres. Una invitada se quedó fuera con ella durante toda la ceremonia para que cuando saliéramos la soltase y subiera corriendo las escaleras hacia nosotros y bajáramos los tres juntos».
La celebración tuvo lugar en la Finca Prados Moros. «No podemos estar más felices con esta elección porque la atención fue más que perfecta. Antes de mirar a Nacho o Ana para decirles qué necesitábamos, ya estaban ahí dispuestos a todo. Se encargaron de colocar todos los detalles y puestos que quisimos poner. La comida estaba riquísima y el lugar tiene un encanto especial». No faltó detalle, todo estaba perfecto y en las imágenes podemos ver el amor con el que se preparó.
De la papelería se encargó Gema, de Estudio Requetébien, así como de las invitaciones. Se decantaron por sobres artesanos de color azul y con el estampado de los azulejos representativos de Italia. También, incluyeron el rosa y el amarillo para los detalles. Con ello, quisieron hacer referencia al mar, la buganvilla y los limones, elementos típicos de la zona y que utilizaron también para la decoración de la boda como hilo conductor. Para el seating plan, eligieron pueblos de la costa amalfitana con su correspondiente ilustración que luego se encontraba en cada una de las mesas. Y detrás de los marcasitios, los novios dedicaron unas palabras a cada uno de los invitados. Como veis, no faltó detalle. «Fue una de las mejores elecciones, el resultado que te ofrece Gema supera por 10 las expectativas que pudieras tener. Le contamos nuestra historia y lo que queríamos transmitir. Supo representar con nota la esencia del sur de Italia de la costa amalfitana que para nosotros es tan especial». Y es que trabajar con ella siempre es un placer. Me encanta rodearme de mujeres emprendedoras que transmiten pasión e ilusión por su trabajo, y Gema es una de ellas sin duda.
Por otro lado, Options fue el encargado de algunos elementos del menaje, como las copas en azul para continuar con la misma paleta de colores. Sandra y Joan, quisieron dar un toque diferente con posavasos de cerámica con el mismo diseño de las invitaciones, y este fue el regalo para los invitados. Además, lo utilizaron también de plato del pan. ¡Una detalle muy original y práctico! Por otro lado, su madre confeccionó todas las servilletas con una tela que eligieron acorde al estilo de la boda, y las prepararon juntas. Un momento único y muy especial que recordarán siempre con mucho cariño.
Para la decoración floral, contaron con Cristian, de Flores Búcaro. «Lo teníamos bastante claro, queríamos crear un comedor como si estuviéramos en una de las calles de Amalfi o Positano, todo lleno de verde, limones y buganvillas». Y así fue, por unas horas he podido trasladarme a los maravilloso rincones de Italia. ¡Un espectáculo!
El cóctel lo amenizó Cosa de Dos Flamenco y fue todo un acierto. «Los invitados disfrutaron un montón y les encantó ya que no se esperaban un coctel tan disfrutón».
La entrada al banquete no dejó indiferente a nadie. «La hicimos con Flying Free y todos lo dimos todo. ¡Qué momentos de felicidad!». También, los invitados pudieron disfrutar de un videoclip que preparó la pareja contando su historia en el lugar donde se conocieron. Una manera muy original de hacer una entrada por todo lo alto.
Durante la comida, hubo momentos muy emocionante. Los novios aprovecharon para mostrar su cariño a las personas más importantes para ellos y entregaron ramos, billetes de crucero, pañuelos bordados… Me encantan los detalles personalizados que con tanto cariño y mimo se preparan. Estoy segura de que a vuestros familiares y amigos les encantaron.
Lo que desde luego no faltó en esta boda fueron los detalles. A Sandra y a Joan no se les escapó nada, y por eso también pusieron un puesto de alpargatas, otro de dulces, de sombreros de paja y por si fuera poco, también repartieron puros. ¡Los mejores anfitriones del mundo!
La barra libre la abrieron con el baile nupcial y la canción Perfect, cantada en italiano por Andrea Bocelli. Después, dio comienzo la fiesta con una actuación de percusión de Drums on Live y disfrutaron de momentos muy divertidos con el fotomatón de Risbox.
Para el baile, Sandra se quitó la cola y apostó por un look más cómodo y desenfadado pero que no dejó indiferente a nadie, pues añadió un gran lazo en la parte trasera dándole un toque más fresco y juvenil. Me encantan los diseños versátiles que ofrecen tantas posibilidades sin necesidad de cambiar de vestido. ¡Todo un acierto!
«Cuando decimos casarnos siempre nos pasamos horas y horas buscando ideas e inspiración para hacer que nuestras bodas sean diferentes e únicas, pues ahora nuestra boda ha sido diferente, nos hemos casado en medio de una pandemia y se ha demostrado que por muchas cosas que pasen, lo importante de las cosas es la esencia y por qué se hacen las cosas, y con todo esto nosotros nos hemos dado cuenta que lo importante somos nosotros, los sentimientos y emociones que supone dar un paso así, dejando a un lado intentar ser la boda top. Ahora mismo, hasta la fecha, estamos completamente seguros de que es la mejor decisión que hemos tomado. La prueba está es que seguimos recibiendo mensajes de nuestros invitados dándonos la enhorabuena por haber tenido valor de haber seguido hacia delante cuando el mundo parecía estar en contra y que nunca han estado en una ceremonia tan emotiva y que hacía tiempo que no lloraban de felicidad».
Y con estas palabras de Sandra ponemos fin a este artículo tan especial que anima a todos esos novios indecisos a dar el paso y valorar lo realmente importante, que es la unión y el amor. Gracias por trasladarme por unas horas a las maravillosas calles de Salerno. ¡Os deseo que este viaje que emprendisteis hace ya 6 años no tenga fin! Gracias por tu relato, Sandra.
Fotos: @click10fotografia
4 respuestas
Hola, soy la madre de Lorena, suegra de Eloy i abuela de Ainoa i Pere, i he visto el reportaje de la boda,
me ha gustado mucho es precioso, muy bien explicado me ha encantado verlo, una boda muy bien organizada, todo al detalle segun mi famila que aistieron a todo el evento, quedaron muy contentos
Deseo que seais muy felices y seguro que asi sera, por el amor que se respira en todo el reportaje, FELICIDADES PAREJA,
Qué ilusión que te haya gustado. Te mando un besazo enorme!!
La ilusión y el amor lo puede todo!! Pareja wapp@s!! Donde los haya!! Felicidades y no perdáis nunca esa felicidad, amor e ilusión de proyecto de vida.
Así es Almudena!! Un abrazo y feliz 2022!!!